Darkness Eyes

Titulo: Darkness Eyes
Autor: Florzhia
Pareja: Jae/?
Género: OneShot
Estado: Finalizado

DARKENESS EYES

Me cansé, me cansé de tener que esperarte horas en la puerta del estudio de grabación. Tomé mi mochila violeta del piso, la colgue sobre mi hombro derecho.

Me arreglé la remera y miré de nuevo hacia la puerta. Solo se hallaban los guardias de seguridad que tanto me conocen, me observaban con tranquilidad. Sin embargo, estaba segura que mi rostro tensionado se notaba a la distancia.

Quería irme per antes tirarte la mochila por la cabeza. Realmente estaba enojada. La puerta se abre , chirriando como usualmente lo hace. ¿Cúando será el día que le coloquen un poco de aceite en las bisagras?

Al fin salés, caminando junto a Yunho, quien me saluda y te deja solo ante mi. Sonries como si el tiempo que te espere nunca hubiera existido. Me indicas que caminemos por otro pasillo, y tomas mi mochila. Caminamos hasta entrar en uno de las tantas oficinas que hay. No había nadie, sin embargo no me da miedo estar a solas contigo.

No me da nervios saber que eres un cantante famoso, y tampoco me siento presionada al saber que puedes tener cuantas chicas quieras.

-Estas hermosa- susurras, mirandome con tus ojos negros. Tan negros que a veces siento que me pierdo en su ausencia de color.-¿Qué pasa?-

-¿Y encima me lo preguntas?-Mi voz alterada te asusta ,haciendo que retrocedas un paso.-Me cansé, Jae...No soy tu mascota.-

-Nunca dije que...- Sé que tienes buenas intenciones conmigo, aun asi te interrumpo hablando más bajo por las dudas que estas paredes proyectaran nuestra discusion.

-Sé que nunca dijiste que era tu mascota. Pero me siento como tal. Siempre corró hacia ti cuando tienes tiempo, estoy a tu lado para darte todo mi apoyo.-Te acercas timidamente, quería alzar mi vista para apreciar tu rostro. Solo pude notar la camisa negra apretada a tu torso, con ese detalle, pude sentir como algo en mi interior proclamaba su atención.- Quisiera que una vez, hicieras algo por mi...-

Dudas, tu mirada vacila. Abres la boca para decir algo. Sabía que esta batalla ya la había ganado, nunca fuiste bueno para expresar tus sentimientos en palabras.

Me acerco a la puerta, siento una rafaga de viento pasar cerca, tu mano detiene la mia evitando que agarre el picaporte. Lo siguiente que pude notar, fue la velocidad en la cual me empujaste contra la pared. Cerré los ojos instintivamente, tu cuerpo presionaba el mío. Un beso en el cuello fue todo lo que necesitaste hacer para hacerme caer en la demencia. Tu camisa era cariciada por mis manos, no sabía si seguirte el juego o irme para jamás volver. Solo sé que te quiero.

Nuestras miradas se encontraron por segundos, ahora tus ojos negros brillaban. Eran como perlas deslumbrantes, susurraste suavemente un "Quedate conmigo...". ¿Cómo lo logras? ¿Cómo logras que me quede quieta , como logras que tu rostro demuestre esa pasión que sientes? Esta vez, yo te beso en tus rosados labios.

Estaba consciente de donde nos encontrabamos, de que la casualidad que alguien entre justo en ese momento eran muy altas. Sin embargo, el beso no disminuye su fuerza, al contrario, fue aumentando de tal forma que tu camisa comienza a desaparecer. Tus manos acarician con vigor mi silueta.

Te odie, te ame y aun sigo amandote. Aquel momento culminó solamente en un beso, aunque la posibilidad de que nuestro encuentro terminada en algo más ,provoca la irracionalidad de mis pensamientos.

Nos separamos ante el magnetismo que nuestros cuerpos manifiestan. Sonries de nuevo, te miró avergonzada al notar como la camisa casi se desprende de tu torso.

- No eres mi mascota-Me reprochas nuevamente.-Eres lo que más amo.-

Asisto con la cabeza, repentinamente vuelvo a sentir tu cuerpo sobre el mio, afianzado en un abrazo, deseando que este se volviera eterno. Una brisa se escapa por debajo de la puerta, te arreglas la camisa al sentirla sobre tu torso. Salimos de aquella oficina, dirigiendonos a una cafetería cercana. La observó por última vez, esperando que en ella se guarde el secreto de nuestra pasión.